Mis lágrimas son eternas cuando recuerdo los momentos en los que le regalé el mundo sin que se diera cuenta. Tampoco se dió cuenta de que también le regalé mis sueños desde el árbol en el que yo estaba subida. Tampoco se dió cuenta de que se me escapó una lágrima cuando tomé su mano por primera vez...No sabe muchas cosas, pero a la vez lo sabe todo. ¿Sabrá acaso que siempre voy detrás suyo?. ¿Sabrá que siempre estoy cuidándole los sueños mientras duerme?. ¿Será que se le ha pasado por la cabeza, que a veces pretendo guardar mi deseo para usarlo con otros y que el resultado es nefasto?. ¿Sabrá que me enamoran hasta sus actitudes hoscas y su indiferencia?. ¿Acaso sabe que éste es el día número 308 en el que aun me despierto por la mañana pensando en sus ojos?.
PD: Es mi corazón el que te habla...
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